Los varios Estados de Conciencia, el Simbolismo y el Enfoque Múltiple
Los objetos físicos son los más obvios de tus símbolos y precisamente por esa razón no te das cuenta en absoluto que son símbolos.
A diferentes niveles, la conciencia trabaja con diferentes tipos de símbolos. Los símbolos son métodos para expresar la realidad interior. Trabajando en una sola dirección, el alma, utilizando su conciencia, expresa la realidad interior por medio de tantos símbolos como sea posible, a través de un simbolismo viviente y cambiante. Cada símbolo está entonces consciente, individualizado y enterado, en su propia medida.
Al hacerlo así, el alma crea continuamente nuevas variedades de realidad interior para ser exploradas. Operando en la dirección opuesta, por así decirlo, el alma misma se despoja de todos los símbolos y de todas las representaciones, y utilizando su conciencia de manera diferente, aprende a explorar su propia experiencia directa. Sin los símbolos que llegan entre ella y la experiencia, se perfecciona a sí misma en un tipo de desarrollo y logro de valores que actualmente no puedes entender, excepto simbólicamente.
Todos estos esfuerzos continúan si estás despierto o estás dormido. Una vez que te enteras de estas actividades, sin embargo, es posible que tú mismo te sorprendas en varios estados de conciencia, y aun a veces siguiendo tu propio progreso, particularmente a través de los estados del sueño. Tu cuerpo es tu símbolo más íntimo en este punto, y además el más obvio.
Utilizarás la idea de un cuerpo en la mayoría de los estados de conciencia. Cuando dejas tu cuerpo físico, en cualquier tipo de experiencia fuera del cuerpo, realmente lo dejas en otro cuerpo que solo es ligeramente menos físico. Este a su turno es “más tarde” descartado por uno aun menos físico, pero la idea de forma es un símbolo tan importante que lo llevas a través de toda tu literatura religiosa y de todas las historias del más allá.
En un punto, desaparecerá con los otros símbolos. Hubo un tiempo, hablando en tus términos, antes de la formación de los símbolos, un tiempo tan apartado de tu idea de la realidad, que solo en las áreas más protegidas del sueño el recuerdo de él siempre regresaba. Te parece que sin símbolos no habría existencia, pero ésta es una deducción lo suficientemente natural, ya que estás tan orientado a los símbolos.
Aquellos estados de conciencia que ocurren después de la muerte todavía tratan con símbolos, aunque hay mucha mayor libertad en su utilización y mucha mayor comprensión de su significado. Pero en los estados de conciencia más elevados los símbolos ya no son necesarios y la creatividad tiene lugar completamente sin su utilización.
Obviamente, no puedes ahora llegar a enterarte de ese estado de conciencia, pero puedes hacerle seguimiento a las maneras como los símbolos aparecen, tanto en la vida de vigilia como en el estado del sueño, y aprender a conectarlos con los sentimientos que ellos representan. Aprenderás que ciertos símbolos aparecerán personalmente para ti en varios estados de conciencia y estos pueden servir como puntos de reconocimiento en tus propias exploraciones. Por ejemplo, cuando una persona está a punto de dejar su cuerpo en el estado del sueño, a menudo puede encontrarse en una casa o apartamento extraño que ofrece oportunidades para la exploración. Las casas o apartamentos serán siempre diferentes y sin embargo el símbolo siempre es una señal de que ha alcanzado un punto de conciencia en particular y está lista para entrar en otro estado de conciencia. Tú mismo puedes tener ciertos símbolos que sirven el mismo tipo de propósito muy individual para ti. Sin embargo, a menos que hagas un esfuerzo en la auto exploración, estas señales simbólicas no tendrán un sentido consciente.
Algunos de esos símbolos permanecen contigo de por vida. Algunos de ellos, en periodos de gran cambio, pueden también alterar su carácter, trayendo cierto sentimiento de desorientación, a medida que estos símbolos familiares inconscientemente presentan una transformación. El mismo tipo de cosa aplica a tu vida física. Un perro puede ser para ti un símbolo de alegría natural, por ejemplo, o de libertad. Después de ver un accidente en el que muere un perro, entonces los perros pueden significar algo totalmente diferente para ti.
Esto es obvio, por supuesto, pero el mismo tipo de símbolo cambiante puede ocurrir dentro de los sueños. El accidente del perro puede ser una experiencia del sueño que cambia entonces tu sentimiento simbólico consciente hacia los perros en el estado de vigilia. Una persona puede simbolizar el temor como un demonio, como un animal inamistoso, o aun como un objeto inofensivo perfectamente sencillo; pero si sabes lo que tus propios símbolos significan, puedes utilizar el conocimiento, no solo para interpretar tus sueños, sino también como señales para el estado de conciencia en el que usualmente ocurren.
Los objetos físicos son los más obvios de tus símbolos y precisamente por esa razón no te das cuenta en absoluto que son símbolos.
A diferentes niveles, la conciencia trabaja con diferentes tipos de símbolos. Los símbolos son métodos para expresar la realidad interior. Trabajando en una sola dirección, el alma, utilizando su conciencia, expresa la realidad interior por medio de tantos símbolos como sea posible, a través de un simbolismo viviente y cambiante. Cada símbolo está entonces consciente, individualizado y enterado, en su propia medida.
Al hacerlo así, el alma crea continuamente nuevas variedades de realidad interior para ser exploradas. Operando en la dirección opuesta, por así decirlo, el alma misma se despoja de todos los símbolos y de todas las representaciones, y utilizando su conciencia de manera diferente, aprende a explorar su propia experiencia directa. Sin los símbolos que llegan entre ella y la experiencia, se perfecciona a sí misma en un tipo de desarrollo y logro de valores que actualmente no puedes entender, excepto simbólicamente.
Todos estos esfuerzos continúan si estás despierto o estás dormido. Una vez que te enteras de estas actividades, sin embargo, es posible que tú mismo te sorprendas en varios estados de conciencia, y aun a veces siguiendo tu propio progreso, particularmente a través de los estados del sueño. Tu cuerpo es tu símbolo más íntimo en este punto, y además el más obvio.
Utilizarás la idea de un cuerpo en la mayoría de los estados de conciencia. Cuando dejas tu cuerpo físico, en cualquier tipo de experiencia fuera del cuerpo, realmente lo dejas en otro cuerpo que solo es ligeramente menos físico. Este a su turno es “más tarde” descartado por uno aun menos físico, pero la idea de forma es un símbolo tan importante que lo llevas a través de toda tu literatura religiosa y de todas las historias del más allá.
En un punto, desaparecerá con los otros símbolos. Hubo un tiempo, hablando en tus términos, antes de la formación de los símbolos, un tiempo tan apartado de tu idea de la realidad, que solo en las áreas más protegidas del sueño el recuerdo de él siempre regresaba. Te parece que sin símbolos no habría existencia, pero ésta es una deducción lo suficientemente natural, ya que estás tan orientado a los símbolos.
Aquellos estados de conciencia que ocurren después de la muerte todavía tratan con símbolos, aunque hay mucha mayor libertad en su utilización y mucha mayor comprensión de su significado. Pero en los estados de conciencia más elevados los símbolos ya no son necesarios y la creatividad tiene lugar completamente sin su utilización.
Obviamente, no puedes ahora llegar a enterarte de ese estado de conciencia, pero puedes hacerle seguimiento a las maneras como los símbolos aparecen, tanto en la vida de vigilia como en el estado del sueño, y aprender a conectarlos con los sentimientos que ellos representan. Aprenderás que ciertos símbolos aparecerán personalmente para ti en varios estados de conciencia y estos pueden servir como puntos de reconocimiento en tus propias exploraciones. Por ejemplo, cuando una persona está a punto de dejar su cuerpo en el estado del sueño, a menudo puede encontrarse en una casa o apartamento extraño que ofrece oportunidades para la exploración. Las casas o apartamentos serán siempre diferentes y sin embargo el símbolo siempre es una señal de que ha alcanzado un punto de conciencia en particular y está lista para entrar en otro estado de conciencia. Tú mismo puedes tener ciertos símbolos que sirven el mismo tipo de propósito muy individual para ti. Sin embargo, a menos que hagas un esfuerzo en la auto exploración, estas señales simbólicas no tendrán un sentido consciente.
Algunos de esos símbolos permanecen contigo de por vida. Algunos de ellos, en periodos de gran cambio, pueden también alterar su carácter, trayendo cierto sentimiento de desorientación, a medida que estos símbolos familiares inconscientemente presentan una transformación. El mismo tipo de cosa aplica a tu vida física. Un perro puede ser para ti un símbolo de alegría natural, por ejemplo, o de libertad. Después de ver un accidente en el que muere un perro, entonces los perros pueden significar algo totalmente diferente para ti.
Esto es obvio, por supuesto, pero el mismo tipo de símbolo cambiante puede ocurrir dentro de los sueños. El accidente del perro puede ser una experiencia del sueño que cambia entonces tu sentimiento simbólico consciente hacia los perros en el estado de vigilia. Una persona puede simbolizar el temor como un demonio, como un animal inamistoso, o aun como un objeto inofensivo perfectamente sencillo; pero si sabes lo que tus propios símbolos significan, puedes utilizar el conocimiento, no solo para interpretar tus sueños, sino también como señales para el estado de conciencia en el que usualmente ocurren.
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