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martes, 30 de noviembre de 2010

La Realidad Desconocida 7

Cuando la conciencia deja el cuerpo, ella altera algunas de las coordenadas. Hay varias cuestiones que involucran la naturaleza de la percepción que ocurre entonces, y estas serán discutidas algo más tarde. La conciencia está equipada para enfocar su energía principal, al menos en tus términos, generalmente dentro del cuerpo, o para desviarse de él por varias cantidades de tiempo. Teóricamente, tu conciencia humana puede tomar muchos caminos diferentes, mientras todavía permanece en su base física. En tiempos históricos del pasado lejano se experimento con diferentes tipos de orientación. Tu propia experiencia privada presente puede dar indicaciones y pistas acerca de tales otras culturas, ya que esas habilidades residen dentro de la estructura natural, ahora, pero están subdesarrolladas.
De una u otra manera, por consiguiente, todos los potenciales de la especie están ahora latentes dentro de cada individuo. Con frecuencia estos brotan a la superficie a través de eventos que pueden parecer extraños. La realidad “desconocida” es desconocida solo porque no has buscado sus aspectos en ti mismo. Se te ha enseñado a prestar atención casi exclusiva a tu comportamiento exterior. Privadamente, entonces, mucha de tu vida interior se te escapa. Con frecuencia estructuras tu vida de acuerdo con esos patrones de eventos exteriores. Estos, aunque importantes, son el resultado de tu propio mundo interior de actividad. Ese mundo interior es tu única conexión real con los eventos exteriores, y los detalles objetivos tienen sentido solamente por la subjetividad que les da nacimiento.
De la misma manera, cuando miras el estado corriente del mundo, o de la historia, con frecuencia estructuras tus percepciones de tal manera que solo se ven las superficies superiores de los eventos. Utilizando el mismo tipo de razonamiento, eres apto para juzgar la historia pasada de tu especie en términos muy limitados, y pasar por alto grandes hechos en tu historia porque parecen no tener sentido.
Mientras crees, por ejemplo, que solo la tecnología, tal como la comprendes, significa progreso, y ese progreso necesariamente requiere una primordial manipulación física del entorno que debe continuar por siempre, juzgas las civilizaciones pasadas en esa luz. Esto te ciega a algunos logros y otras orientaciones a tal punto que no estarás en capacidad de ver la evidencia de logros cuando ella aparece ante tus ojos.
No has trabajado con el poder del pensamiento o del sentimiento, sino solo con sus efectos físicos. Por consiguiente, para ti solamente son obvios los eventos físicamente materializados. No aceptas tus sueños como reales, por ejemplo, pero como norma los consideras fantasías – sucesos imaginarios. Hasta muy recientemente, generalmente creías que toda la información le llegaba al cuerpo a través de los sentidos externos, e ignorabas toda la evidencia en contrario. Era imposible imaginar civilizaciones construidas sobre información que era recibida mentalmente, aceptada conscientemente, y utilizada creativamente. Bajo tales circunstancias, los científicos difícilmente podían buscar precognición en las células. Ellos no creían que existía, para empezar.
El cuerpo humano mismo tiene potenciales ilimitados, y grandes variaciones que permiten diferentes tipos de orientación. El hombre probable representa el hombre alterno desde tu punto de vista, versiones alternas de la especie. Lo mismo aplica individualmente. En estados fuera-del-cuerpo muchas personas han encontrado seres probables y realidades probables. Ellas también han viajado al pasado y al futuro, tal como los concibes. La mente privada contiene dentro de si misma el conocimiento de sus propias probabilidades, y contiene un espejo en el cual la experiencia de la especie puede ser al menos vislumbrada.
Estás acostumbrado a un tipo particular de orientación, acostumbrado a utilizar tu conciencia de una sola manera en particular. Con el fin de estudiar la realidad “desconocida”, sin embargo, debes tratar de ver que más puede hacer tu conciencia. Esto realmente significa que debes aprender a recuperar el verdadero sentimiento de ti mismo.
Hay dos maneras principales de obtener información acerca de la naturaleza de la realidad – un método exterior y uno interior. Los métodos se pueden utilizar juntos, por supuesto, y desde tu punto de mira, debe ser para la mayor eficiencia. Estás bien familiarizado con los medios externos, que implican el estudio del universo objetivo y la recolección de hechos sobre los cuales se hacen ciertas deducciones. En este libro, por lo tanto, estaremos haciendo énfasis en las maneras internas de obtener, no necesariamente los hechos, sino conocimiento y sabiduría. Ahora bien, los hechos te pueden dar o no sabiduría. Ellos pueden, si se siguen servilmente, incluso llevarte lejos del verdadero conocimiento. La sabiduría te muestra los interiores de los hechos, por así decirlo, y las realidades de las cuales surgen los hechos.
Mucho del resto de la Realidad “Desconocida”, entonces, tendrá que ver con una mirada interior a la naturaleza de la realidad, y con algunos ejercicios que te permitirán verte a ti mismo y a tu mundo desde otra perspectiva. Más tarde intento decir mucho más acerca de algunas civilizaciones que, en tus términos, llegaron antes que la tuya. Antes de que puedas comprender su orientación, tendremos que hablar acerca de varios tipos alternos de conciencia y experiencias fuera-del-cuerpo. Esto te ayudará a comprender como otros tipos de cultura pudieron operar de maneras tan extrañas para la tuya.

viernes, 26 de noviembre de 2010

La Realidad Desconocida 6

Todo lo que es evidente tridimensionalmente tiene una fuente interior, de la cual brota su apariencia. Algo de esto, de nuevo, es difícil de explicar – no porque no exista el vocabulario, sino porque el lenguaje de las palabras en serie automáticamente preempaca las ideas dentro de ciertos patrones, y evitar la preempacada puede ser una tarea. Trataremos de hacer lo mejor, sin embargo.
La célula, tal como la comprendes, no es más que la cara tridimensional de la célula. La idea de “Taquiones,” como se comprende corrientemente, es básicamente legitima, aunque sumamente distorsionada. Antes de que una célula como tal haga su aparición física hay “perturbaciones” en el punto en el que la célula misma se mostrará más tarde. Esas perturbaciones son el resultado de la desaceleración de efectos anteriores de actividad más- rápida-que-la-luz, y representa el surgimiento dentro de tu sistema de energía espacio-tiempo que entonces puede ser utilizada y formada efectivamente dentro del patrón celular.
El proceso mismo de desaceleración ayuda a “congelar” la actividad dentro de una forma. A la muerte de una célula, ocurre el proceso contrario – la muerte es el escape de esa energía de la forma de célula, es su liberación, la liberación misma activa ciertos estados de aceleración. Hay lo que podría llamarse un residuo, o deshechos de energía, “cubriendo” la célula, que permanece dentro de este sistema. Nada de esto puede determinarse desde adentro del sistema – es decir, la actividad inicial más-rápida-que-la-luz o la desaceleración posterior. Tal comportamiento más-rápido-que-la-luz, ayuda a formar la base para el universo físico. Esta característica es un atributo de las Unidades de Conciencia, las que ya han reducido la velocidad hasta cierto punto cuando forman las Unidades de Energía Electromagnética.
Mientras opera a través de las estructuras corporales, una conciencia tal como la tuya se enfoca en gran medida sobre la orientación tri-dimensional. En los estados fuera-del-cuerpo, sin embargo, la conciencia puede viajar más rápido que la luz – con frecuencia, de hecho, instantáneamente.
Esto ocurre frecuentemente en el estado del sueño, aunque tal desempeño se puede lograr en varios estados alterados de conciencia. En tales ocasiones, la conciencia simplemente se coloca ella misma en relación diferente con el tiempo y el espacio. El cuerpo físico no puede seguir, sin embargo.
Es alterando su propia relación con el universo físico que la conciencia puede comprender mejor sus propias propiedades, y visualizar desde otro punto de mira ese universo físico, en donde será visto en una luz diferente. Operando por fuera del cuerpo, la conciencia puede percibir mejor las propiedades de la materia. Ella no puede experimentar la materia, sin embargo, de la misma forma como lo puede hacer cuando está orientada físicamente.
Desde nuestro punto de vista ordinario la conciencia que viaja está fuera de enfoque, no está bloqueada dentro de las coordenadas físicas en la forma designada. El así llamado mundo interior al menos puede ser explorado teóricamente, sin embargo, precisamente de tal manera. La conciencia misma se “desbloquea” por un tiempo de sus coordenadas usuales. Cuando esto sucede, el viajero fuera-del-cuerpo no está solamente fuera de su forma corporal. La persona se sale fuera del contexto usual. Incluso si un individuo deja el cuerpo y se pasea alrededor del cuarto, no más que unos pocos pies lejos de donde el cuerpo está localizado, hay alteraciones – la relación de la conciencia con el cuarto es diferente. La relación del individuo con el espacio y el tiempo se ha alterado. El tiempo fuera del cuerpo es “tiempo libre” bajo tus estándares. No envejeces, por ejemplo, aunque este efecto varía de acuerdo con ciertos principios. Mencionaré estos más tarde.
Tal conciencia viajera puede viajar dentro de la realidad física: Mientras no está relacionándose con ese sistema de la manera usual, todavía puede estar aliada con él. Desde ese punto de vista, la materia misma parecerá diferente a lo que es ordinariamente. Por otra parte, una conciencia fuera-del-cuerpo puede también entrar en otras realidades sintonizadas físicamente: aquellas que están operando “a diferentes frecuencias de la tuya.” La básica naturaleza independiente de la conciencia permite tal desenredo. La conciencia del cuerpo mantiene su propio equilibrio, y actúa algo así como estación de mantenimiento.
Cualquier discusión de la realidad desconocida debe implicar necesariamente ciertas hipótesis usualmente descartadas acerca de las características de la conciencia misma. El mundo, tal como lo conoces, es el resultado de un grupo complicado de “códigos,” cada uno encerrado dentro cada uno de los otros, cada uno, en esos términos, dependiendo de los otros. Tu universo percibido precisamente en todas sus partes, entonces, es el resultado de patrones codificados, cada uno ajustándose perfectamente dentro del siguiente. Alteras uno de estos y hasta cierto punto sales de ese contexto. Cualquier evento de cualquier tipo que no se intersecte directamente, inmaculadamente, con tu continuum espacio-tiempo, no sucede, en tus términos, sino que se cae. Se vuelve probable en tu sistema, pero busca su propio “nivel,” y llega a realizarse al caer en su lugar en otra realidad cuya “secuencia codificada” se ajusta a la suya propia.

martes, 23 de noviembre de 2010

La Realidad Desconocida 5

Aquí la conciencia decide dejar la carne, para aceptar una muerte oficial. Ya has escogido un contexto, sin embargo, y parece que ese contexto es inevitable. Parece, entonces, que el cuerpo durará hasta ahora y no más. El hecho es que has escogido el tipo de conciencia que se identifica con la carne por un cierto periodo de tiempo. Otras especies de conciencia – de un orden totalmente diferente, y con un ritmo diferente de experiencia - pensarían de tu vida, en tus términos, como un día, y no tendrían problema cubriendo la brecha entre la vida aparente, la muerte, y la nueva vida.
Algunos individuos se encuentran ellos mismos con recuerdos de otras vidas, las que son otros días para el alma. Tales personas entonces se vuelven concientes de una conciencia más grande pasando por encima de esas brechas, y dándose cuenta que la experiencia terrenal puede contener, entre otras cosas, un conocimiento de la existencia en más de un cuerpo. Inherentemente, entonces, la conciencia, afiliada con la carne, puede de hecho llevar tales comprensiones. La mente del hombre, tal como la conoces, muestra al menos la habilidad potencial para manejar un tipo de memoria con la que usualmente no estás familiarizado. Esto quiere decir que aun biológicamente la especie está equipada para tratar con diferentes secuencias del tiempo, mientras todavía está manipulando dentro de un particular esquema del tiempo. Esto también implica una riqueza psicológica mayor – bastante posible, de nuevo, dentro de la realidad corporal – en la que muchos niveles de relación pueden ser manejados. Tal conocimiento interior está inherente en las células, y en términos ordinarios de evolución es bastante posible como un desarrollo “futuro.”
El conocimiento es usualmente trasmitido a través de las edades en tu realidad, a través de libros y escritos históricos, y sin embargo cada individuo contiene dentro de si mismo un gran repositorio: conocimiento directo del pasado, en tus términos, a través de la comprensión inconsciente.
La realidad desconocida: Mucha de esa realidad es desconocida simplemente porque tus creencias te cierran a tu propio conocimiento. Los alcances de tu propia conciencia no están limitados. Por lo que aceptas la idea de una línea recta de movimiento del tiempo, no puedes ver antes o después de lo que concibes como tu nacimiento o muerte, y sin embargo tu conciencia mayor está bastante enterada de tal experiencia. Idealmente, es posible, no solo recordar vidas “pasadas,” sino planear las futuras ahora. En términos más amplios, todas esas vidas ocurren al tiempo. Tu estructura neurológica actual hace que esto parezca imposible, y sin embargo tu conciencia interior no está así de impedida.

Elemento de Practica

Puedes mantener dentro de la atención consciente mucha más información de la que realizas. Te has hipnotizado a ti mismo al creer que tu conciencia está muy limitada.
Piensa en el día de ayer. Trata de recordar lo que hiciste cuando te levantaste; que usaste como vestido. Intenta seguir la secuencia de tus actividades desde el momento en que despertaste hasta cuando fuiste a dormir. Encarna los detalles. Trata de recordar tus sentimientos en todos esos momentos. La mayoría será afortunada si llega así de lejos. Aquellos que lo hicieron, pueden ir aun más allá y tratar de recordar los sueños de vigilia que también pudieron haber tenido. Trata de recordar que pensamientos extraviados llegaron a tu mente.
Al principio, hacer esto tomará toda tu atención. Podrías hacer el ejercicio sentándote tranquilamente, o al viajar en el bus, o esperando a alguien en una oficina. Algunos de ustedes podrían ser capaces de hacer el ejercicio mientras ejecutan una serie de acciones más o menos automáticas – pero no trates de llevarlas a cabo mientras conduces tu carro, por ejemplo.
A medida que te vuelves más experto en ello, entonces, a propósito, has algo más al mismo tiempo – una actividad física, por ejemplo. Cuando la mayoría de ustedes empieza este ejercicio, parecerá casi como si ayer hubieran sido sonámbulos. La precisa, sutil alineación de los sentidos con la actividad física parecerá simplemente perdida; sin embargo, a medida que progresas, los detalles se volverán claros, y encontrarás que puedes al menos mantener dentro de tu mente ciertos aspectos de la realidad de ayer, mientras mantienes tu arraigo en el día de hoy.
En términos más amplios, hay otras vidas totales, las que para ti están olvidadas, esencialmente como el ayer está olvidado. Estas también, sin embargo, son una serie de actividades secundarias, que viajan por debajo de tu preocupación primordial actual. Ellas son tan inconscientemente parte de tu presente, y están tan conectadas con él, como lo es el ayer.
Ahora, la segunda parte del ejercicio.
Imagina vívidamente lo que harás mañana, y en detalle planea un día probable que surgirá naturalmente de tu experiencia, comportamiento y propósitos actuales. Síguelo como lo hiciste con la primera parte del ejercicio. Esa realidad del día ya está prevista por tus células. Tu cuerpo se ha preparado para ella, todas sus funciones proyectando precognitivamente su propia existencia dentro de ella. Tu vida “futura” existe de la misma manera y, en tus términos, crece tanto desde tu presente como el mañana crece desde tu hoy.
Hacer el ejercicio simplemente familiarizará tu conciencia normal con la sensación de su propia flexibilidad. Estarás ejercitando los músculos invisibles de tu conciencia tan ciertamente como podrías ejercitar tu cuerpo con la gimnasia.
Para otras porciones de ti mismo, parecerías ser un sonámbulo. La plena participación creativa en cualquier momento, sin embargo, te despierta a tus propios potenciales, y por consiguiente te permite experimentar unidad entre tu propia conciencia y la comprensión de tus células físicas. Esas células son tan espirituales como lo es tu alma.

sábado, 20 de noviembre de 2010

La Realidad Desconocida 4

Bajo ciertas condiciones, por lo tanto, el cuerpo puede mantenerse a si mismo mientras la “conciencia principal” está lejos de él. La conciencia del cuerpo es bastante capaz, entonces, de proporcionar el equilibrio general. A ciertos niveles del estado del sueño esto de hecho ocurre. En el sonambulismo el cuerpo está activo, pero la conciencia principal no está “despierta.” Ella no está manipulando el cuerpo. La conciencia principal está en otra parte. Bajo tales condiciones, el cuerpo puede ejecutar tareas y con frecuencia maniobrar con un increíble sentido de equilibrio. Esta finura insinúa habilidades físicas no utilizadas ordinariamente. La conciencia principal, por sus creencias, con frecuencia obstaculiza tal manipulabilidad en la vida de vigilia normal.
Miremos por un momento la conciencia del cuerpo.
Ella está equipada, como lo está un animal, para desempeñarse hermosamente en su entorno. La llamarías sin sentido, ya que parecería no razonar. Para el solo propósito de esta discusión, imagina un cuerpo con una conciencia del cuerpo operando completamente, no enferma por alguna razón o por defectos de nacimiento, pero una sin la conciencia predominante dirigida por el ego que tienes. Ha habido especies de tal
naturaleza. En tus términos, ellos parecerían ser como sonámbulos, y sin embargo sus habilidades físicas sobrepasarían las tuyas. Ellos eran en realidad tan ágiles como los animales – y no eran inconscientes. Ellos simplemente se entendían con un tipo diferente de conocimiento.
En tus términos, ellos no tenían un propósito general, y sin embargo su propósito era simplemente ser. Sus puntos de conciencia principales estaban en otra parte, en otro tipo de realidad, mientras sus manifestaciones físicas estaban separadas. Sus enfoques de conciencia principales eran escasamente conscientes de los cuerpos que habían creado. Sin embargo, aun esos cuerpos aprendieron “a través de la experiencia,” y empezaron a “despertar” para volverse conscientes de ellos mismos, empezaron a descubrir el tiempo, o crearlo.
Los sonámbulos, como los llamaremos, no estaban dormidos para ellos mismos, y parecerían así solamente desde tu punto de vista. Hubo varias de tales razas de seres humanos. Su experiencia principal estaba fuera del cuerpo. La existencia física corporal era un efecto secundario. Para ellos lo real era la vida del sueño, que contenía el más alto estimulo, la experiencia más enfocada, el propósito más mantenido, la actividad más significativa, el comportamiento social y cultural más organizado. Ahora bien, esta es la otra cara de tu propia experiencia, por así decirlo. Tales razas dejaron la tierra física como la encontraron. La actividad principal, entonces, implicaba la conciencia separada del cuerpo. En tus términos, la cultura física era rudimentaria.
Ahora bien, el organismo físico como tal es competente en ese tipo de sistema de realidad. No es mejor o peor que el tuyo. Es simplemente un comportamiento alterno, biológica y espiritualmente posible. No se establecieron sistemas de transporte físico complicados. En el estado físico, en lo que llamarías el estado de vigilia, estos individuos dormían. Para ti, hablando comparativamente, las actividades de vigilia parecerían como sueño, y sin embargo ellos se comportaban con una gran gracia física natural, permitiéndole al cuerpo funcionar a capacidad. Ellos no lo cargaban con creencias negativas de enfermedad o limitación. Tales cuerpos no envejecían hasta el grado en que tu cuerpo lo hace ahora, y disfrutaban la más grande facilidad y sentido de pertenencia con el entorno.
La conciencia conectada con la carne, entonces, tiene gran libertad de acción espiritualmente y biológicamente, y ella misma puede enfocarse de muchas maneras con y a través de la carne, además de tu propia orientación particular. Han existido civilizaciones altamente sofisticadas y desarrolladas que no serian evidentes para ti porque su principal orientación era mental o psíquica, mientras la raza física misma parecería ser sumamente subdesarrollada.
En algunos de sus sueños privados, muchos de mis lectores habrán descubierto una realidad casi tan vívida como la normal, y algunas veces más. Estas experiencias te pueden dar un vago indicio del tipo de existencia de la que estoy hablando. También hay aparatos físicos conectados con las habilidades de hibernación de algunos animales que pueden dar indicaciones adicionales en cuanto a las posibles relaciones de la conciencia con el cuerpo. Bajo ciertas condiciones, por ejemplo, la conciencia puede dejar el mecanismo corporal mientras él permanece intacto – funcionando, pero a un nivel de mantenimiento. Cuando regresan las condiciones óptimas, entonces la conciencia reactiva el cuerpo. Tal comportamiento es posible no solamente con los animales. En sistemas diferentes al tuyo, hay realidades en las que los organismos físicos son activados después de lo que te parecerían ser siglos de inactividad – de nuevo, cuando las condiciones son las correctas. Hasta cierto punto, tus propios ciclos de vida y muerte son simplemente otros aspectos del principio de hibernación tal como lo entiendes. Tu propia conciencia deja el cuerpo casi de la misma manera que los mensajes saltan de las terminales nerviosas. La conciencia no es destruida en el entretanto.
Ahora bien, en el caso de un animal que hiberna, el cuerpo está en el mismo estado. Pero en la hibernación más grande de tu propia experiencia, el cuerpo como un todo se vuelve inoperable. Las células dentro de ti obviamente mueren constantemente. El cuerpo que tienes ahora no es el que tenías hace diez años; su composición física ha muerto completamente muchas veces desde tu nacimiento, pero, nuevamente, tu conciencia llena las brechas. Ellas podrían ser aceptadas en cambio, caso en el cual te parecería que eras, digamos, un ser reencarnado a los 7 anos, o a los 14 o a los 21. La particular secuencia de tu propia conciencia sigue adelante, sin embargo. En términos básicos, el cuerpo muere con frecuencia, y tan seguramente como piensas que muere una vez en la muerte que reconoces. En numerosas ocasiones se separa, pero tu conciencia pasa por encima de esas “muertes.” No las percibes. La materia de tu cuerpo literalmente cae a la tierra muchas veces, así como piensas que lo hace solamente al “final de tu vida.”
De nuevo, tu propia conciencia triunfantemente cabalga sobre esas muertes que no reconoces como tales. En tu existencia tridimensional escogida, sin embargo, y en esos términos, tu conciencia finalmente reconoce una muerte. Desde el exterior es casi imposible señalar esa intersección de la conciencia y de su aparente separación del cuerpo. Hay un tiempo cuando tú, como una conciencia, decides que la muerte ocurrirá, cuando, en tus términos, ya no cubres la brecha de las muertes minúsculas no aceptadas.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

La Realidad Desconocida 3

La conciencia opera con lo que puedes llamar sistemas de código. Estos son incontables. La conciencia se diferencia ella misma, por lo tanto, operando bajo ciertos sistemas de código que ayudan a dirigir particulares tipos de enfoque, trayendo ciertos tipos de significancia mientras bloquea otra información.
Esta otra información, por supuesto, bien podría ser significativa en diferentes sistemas de código. A su manera, sin embargo, estos sistemas están interrelacionados, de tal manera que a otros niveles hay comunicación entre ellos – información secundaria, podrías decir, que es de apoyo, pero no para concentrarse sobre ella primordialmente.
Estos sistemas de código implican construcciones moleculares y valores de luz, y en ciertas maneras los valores de luz son utilizados tan precisa y efectivamente como lo es tu alfabeto. Por ejemplo, ciertos tipos de vida responden obviamente a espectros con los que no estás familiarizado – pero más allá de eso, hay rangos electromagnéticos, o más bien extensiones de rangos electromagnéticos, completamente desconocidos para ti, a los que responden otras formas de vida.
Nuevamente, estos sistemas de código están interrelacionados. De la misma forma, la psique privada contiene dentro de ella indicios y vislumbres de otras realidades alternas. Estas operan como códigos secundarios, por así decirlo, por debajo de la existencia que reconoces oficialmente. Tales sistemas secundarios te pueden decir mucho acerca de los potenciales de la realidad humana, aquellos que están latentes pero pueden en cualquier momento ser “elevados” a importancia primaria. Tales sistemas secundarios también señalan los desarrollos probables posibles para los individuos o la especie.
Todas las probabilidades prácticamente posibles en el desarrollo humano están por consiguiente presentes en uno u otro grado en cada individuo. Cualquier avance biológico o espiritual que pudieras imaginar, por supuesto no vendrá de ninguna agencia exterior, sino desde adentro de la herencia de la conciencia hecha carne. Generalmente, aquellos vivos en este siglo escogieron un tipo particular de orientación. La especie escogió especializarse en ciertos tipos de manipulación física y dedicar sus energías en ciertas direcciones. Esas direcciones han producido una realidad única a su propio modo. El hombre no se ha llevado a un callejón sin salida, en otras palabras. Ha estado estudiando la naturaleza de su conciencia – utilizándola como si ella estuviera separada del resto de la naturaleza, y por consiguiente viendo la naturaleza y el mundo en una luz particular. Esa luz ha hecho finalmente que se sienta aislado, solitario, y hasta cierto punto relativamente impotente.
Está aprendiendo como utilizar la luz de su propia conciencia, y descubriendo que tan lejos podía contar con ella utilizando un método particular. Está estudiando lo que puede y no puede hacer con ese enfoque particular. Está descubriendo ahora que necesita otras luces también, en otras palabras – que ha estado confiando solo en una pequeña parte de la totalidad de un reflector interior que puede utilizarse en muchas direcciones. Miremos algunas de esas otras direcciones que son nativas para la conciencia del hombre, que están esperando para ser utilizadas efectivamente.
Estoy hablando en tus términos históricos porque antes del sistema histórico que reconoces, el hombre realmente había experimentado con estas otras direcciones, y con algún éxito. Esto no quiere decir que el hombre en el presente haya caído desde algún logro espiritual más alto a su estado actual.
Hay ciclos en los que la conciencia forma la experiencia terrenal, y traza las secuencias históricas. Así, ha habido otras especies de la humanidad además de la tuya, cada una manejando la información física a su propia manera. Algunas han tomado otras direcciones, por consiguiente, distintas a la que tú escogiste. Incluso esos senderos están latentes, o son secundarios, sin embargo, dentro de tu propia experiencia privada o colectiva. Ellos residen dentro de ti, presentándote realidades alternas que puedes o no escoger privadamente o en masa, según prefieras.
Cada sistema, por supuesto, produce su propia cultura, “tecnología,” arte, y ciencia. El cuerpo físico está básicamente equipado para mantenerse el mismo como un organismo saludable de larga vida, mucho más allá de tu comprensión actual, hablando médicamente. La comprensión celular proporciona todo tipo de terapéuticas internas que operan bastante naturalmente. Hay un toma y dame físico entre el cuerpo y el entorno, más allá del que reconoces; una dinámica interior aquí que se te escapa, que une la salud de las plantas, los animales, y los hombres. En el más simple y mundano de los ejemplos, si estás viviendo en un entorno saludable y bien balanceado, las plantas de tu casa y tus animales también estarán bien. Tú formas tu entorno y eres parte de él. Reaccionas a él, con frecuencia olvidando esa relación. Idealmente, el cuerpo tiene la capacidad de mantenerse el mismo en excelente salud – pero más allá de eso, de mantenerse el mismo en los más altos niveles de logro físico. Las hazañas de tus más grandes atletas te dan una pista de la verdadera capacidad del cuerpo. En tu sistema de creencias, sin embargo, esos atletas deben adiestrar y concentrar toda su atención en esa dirección, a menudo a expensas de otras partes de su propia experiencia. Pero sus ejecutorias te muestran lo que el cuerpo está en capacidad de hacer.
El cuerpo está equipado, de nuevo ahora, idealmente, para desembarazarse de cualquier enfermedad, y de mantener su estabilidad en lo que llamarías vejez avanzada, con solo un cambio general gradual. A lo mejor, sin embargo, el cambio produciría alteraciones espirituales. Cuando sales a unas vacaciones, por ejemplo, cierras tu casa. En estos términos ideales, la muerte implicaría el cierre de tu casa física; ella no se derrumbaría a tu alrededor.
Ahora bien, ciertos individuos vislumbran esta gran habilidad curativa natural del cuerpo, y la utilizan. Los médicos algunas veces la encuentran, cuando un paciente con una así llamada enfermedad incurable se recupera repentinamente. Las curaciones “milagrosas” son simplemente ejemplos de la naturaleza no obstaculizada. Médicos completos, como se mencionó antes, serían personas que comprendieran la verdadera naturaleza del cuerpo y sus potenciales – personas que por consiguiente trasmitirían tales ideas a otros y los estimularían a confiar en la validez del cuerpo. Algunas de las habilidades del cuerpo te parecerán imposibles, ya que no tienes evidencias para soportarlas. Muchos órganos pueden reemplazarse ellos mismos; las partes enfermas pueden ser reemplazadas por nuevo tejido.
Muchas personas, sin saberlo, han desarrollado un cáncer y se han librado de él. Los apéndices removidos por operaciones han vuelto a crecer. Estos poderes del cuerpo son biológicamente bastante alcanzables en términos prácticos, pero solo con un cambio completo de enfoque y de creencia. Tu insistencia en separarte de la naturaleza automáticamente te impide confiar en los aspectos biológicos del cuerpo, y tus conceptos religiosos te enajenan más aun de la espiritualidad del cuerpo.
En tu realidad, tu conciencia usualmente es identificada con el cuerpo; por otra parte, quiere decir que piensas de tu conciencia como estando siempre dentro de tu carne. Sin embargo, muchos individuos se han encontrado a si mismos fuera del cuerpo, completamente conscientes.

domingo, 14 de noviembre de 2010

La Realidad Desconocida 2

Las células por supuesto están cambiando. Los átomos y moléculas dentro de ellas están siempre en un estado de flujo. Las Unidades de Conciencia (UC) que están dentro de toda la materia tienen un banco de memoria que sobrepasaría el de cualquier computador. Como componentes celulares, los átomos y las moléculas, por consiguiente, llevan la memoria de todas las formas de las que han sido parte.
A niveles profundos, las células están siempre funcionando con probabilidades, y comparando acciones y desarrollos probables a la luz de la información genética. Está involucrado el más intricado comportamiento y se han hecho cálculos instantáneos, por ejemplo, antes de que puedas dar un paso o levantar un dedo. Esto no involucra solamente el comportamiento predictivo del organismo físico solo, sin embargo. A estos niveles profundos, la actividad celular incluye hacer juicios predictivos acerca del entorno exterior del cuerpo. El cuerpo obviamente no opera solo, sino en relación con todo a su alrededor. Cuando quieres caminar a través del cuarto, el cuerpo debe no solo operar utilizando la retrospectiva y la “predicción” hasta donde concierne a su propio comportamiento, sino que debe tomar en consideración la actividad predictiva de todos los otros elementos en ese cuarto.
A niveles básicos, por supuesto, el movimiento de un músculo implica el movimiento de células y de componentes celulares. Aquí estoy diciendo que los átomos y las moléculas mismas, por sus características, no solo tratan con probabilidades dentro de la estructura celular del cuerpo, sino que ayudan al cuerpo a hacer juicios predictivos acerca de entidades u objetos por fuera de si mismas.
Tú “sabes” que una silla no te va a perseguir alrededor del cuarto, por ejemplo - al menos las probabilidades están en contra de ello. Sabes esto porque tienes una mente racional, pero ese tipo particular de mente racional sabe lo que sabe porque a niveles profundos las células están conscientes de la naturaleza de la acción probable. Las creencias de la mente consciente, sin embargo, establecen tus objetivos y propósitos. “Tú” eres el que decide caminar a través del piso, y entonces tienen lugar todos estos cálculos internos para ayudarte a lograr tu objetivo. La intención consciente, por lo tanto, activa los mecanismos internos y cambia el comportamiento de las células y sus componentes.
En términos mucho más amplios, los objetivos establecidos conscientemente por tu especie también ponen en operación el mismo tipo de actividad biológica interior. Los objetivos de la especie no existen aparte de objetivos individuales. A medida que vas por la vida, por consiguiente, estás tomando parte muy efectivamente en los desarrollos “futuros” de tu especie. Miremos por un momento la psique privada.
La “psique privada” suena como un término fino, pero no tiene sentido, a menos que lo apliques a tu propia psique. Una pequeña cantidad de auto-examen debería mostrarte que en una manera muy simple siempre estás pensando en probabilidades. Siempre estás tomando opciones entre acciones probables y cursos alternativos. Una opción presupone actos probables, cada uno posible, cada uno en capacidad de realización dentro de tu sistema de realidad. Tu experiencia privada está mucho más llena de tales decisiones de lo que usualmente te das cuenta. Hay pequeños casos inocuos que surgen diariamente: ¿“Iré al cine o a jugar bolos”? ¿“Me cepillo los dientes ahora, o más tarde”? ¿“Debo escribirle a mi amigo ahora, o mañana”? Hay también cuestiones más pertinentes que tienen que ver con la profesión, el modo de vida, y otras implicaciones. En tus términos, cada decisión que tomes altera la realidad que conoces en uno u otro grado.

Elemento Práctico

Para un ejercicio, toma notas por un día, o algo así, de todas las veces en que te encuentres pensando en acciones probables, grandes o pequeñas. En tu mente, trata de seguir “que podría haber pasado” si hubieras tomado el curso que no tomaste. Enseguida imagina que podría suceder como resultado de tus decisiones escogidas. Eres un miembro de la especie. Cualquier opción que tomes privadamente la afecta biológicamente y psíquicamente.
Puedes literalmente escoger entre la salud y la enfermedad; entre una concentración más sobre lo mental que sobre lo físico, o en lo físico más que en lo mental. Tales decisiones privadas afectan la herencia genética de la especie. Tu intención es lo más importante – ya que puedes alterar tus mensajes genéticos dentro de ciertos límites. Puedes causar que una célula, o un grupo de células, cambien su auto-imagen, por ejemplo; y nuevamente, haces esto con frecuencia – a medida que tu mismo te curas de enfermedades por tu intención de estar bien. En tal caso, sin embargo, las cualidades auto curativas de las células son reforzadas, y las habilidades auto curativas de la especie también son fortalecidas.

Ahora bien. Tu psique privada está íntimamente concernida con tu existencia terrenal, y en tu estado del sueño te entiendes con acciones probables, y con frecuencia encuentras en esa condición las soluciones a los problemas o cuestiones que surgen, que tienen que ver con las secuencias probables de los eventos.
En muchas ocasiones entonces tú mismo te presentas un problema - “¿Debo hacer esto o aquello?” – y formas un sueño en el que sigues los futuros probables que “resultarían” de los cursos disponibles. Mientras estás durmiendo o soñando, tu actividad química y hormonal sigue los cursos de los sueños. Aun en tu realidad aceptada, entonces, hasta ese punto, en tal sueño reaccionas a eventos probables, como también a los eventos escogidos para la experiencia física de vigilia. Tu vida diaria es afectada, porque en tales sueños te entiendes con previsibilidades probables. Difícilmente estás solo, sin embargo, así que cada individuo vivo también tiene sus sueños privados, y estos ayudan a formar la secuencia aceptada de probabilidad del día siguiente, y la del “tiempo por venir.” Las decisiones personales todas le suman a los sucesos globales en un determinado día.
Hay tierras de la mente. Es decir, la mente tiene sus propias “civilizaciones,” su propia cultura y geografía personales, su propia historia e inclinaciones. Pero la mente está conectada con el cerebro físico, y de esta manera, oculta en los pliegues del cerebro, hay una memoria arqueológica. Hasta cierto punto, lo que conoces ahora depende de lo que será conocido, y de lo que ha sido conocido, en tus términos. Las razas “del pasado” de los hombres viven hasta ese punto dentro de tu Ahora, como lo hacen aquellas que aparentemente vendrán después.
Así, hablando idealmente, la historia de tu especie puede ser descubierta muy claramente dentro de la psique; y los verdaderos eventos arqueológicos son encontrados, no solamente destapando rocas y reliquias, sino trayendo a la luz, por así decirlo, las memorias que residen dentro de la psique.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

La Realidad Desconocida 1

Empecemos esta sección con una breve discusión relacionada con la “evolución.”
Por ahora, piensa en ella como usualmente lo haces, en un contexto del tiempo. Ha sido de moda en el pasado creer que cada especie estaba orientada egoístamente hacia su propia supervivencia. Cada una era vista en competición con todas las otras especies. En esa estructura, la cooperación era simplemente un subproducto de un impulso primario hacia la supervivencia. Una especie podía usar a otra, por ejemplo. Se pensaba que la especie cambiaba, y “mutaba” la forma, por una alteración previa en el entorno, en el que cada especie determinada tenía que adaptarse o desaparecer. El poder motivante era siempre proyectado hacia fuera.
Todo esto presentaba un cuadro bastante equivocado. Hablando físicamente, la tierra misma tiene su propio tipo de gestalt de conciencia. Si debes hacerlo, entonces piensa de esa conciencia de la tierra como subiendo en grados en grandes vertientes de conocimiento, desde partículas de polvo y piedra “relativamente” inertes, hasta los reinos mineral, vegetal y animal. Aun entonces, recuerda que esos reinos no están tan separados, después de todo. Cada uno está muy relacionado con cada uno de los otros. Nada sucede en uno de esos reinos que no afecte a los otros. Una gran cooperación afable existe entre esos sistemas aparentemente separados, sin embargo. Si recordaras que incluso los átomos y las moléculas tienen conciencia, seria más fácil para ti comprender que en realidad hay un cierto tipo de conocimiento que une estos reinos.
En tus términos, la conciencia de ser no se desarrolló por algunas circunstancias externas en las que tu especie se impuso, por así decirlo. De hecho, esa conciencia de ser en cualquier persona depende de la cooperación constante y milagrosa que existe entre los mundos mineral, vegetal y animal. La intención interior siempre forma cualquier alteración exterior. Esto aplica en cualquier escala que utilices. La conciencia forma el entorno. El entorno mismo es consciente. Los átomos y las moléculas mismas operan en su propio campo de probabilidades. En sus propias formas, “añoran” todos los desarrollos probables. Cuando forman criaturas vivientes, se convierten en la base física para la alteración de la especie. La adaptabilidad del cuerpo no es simplemente un mecanismo o cualidad de ajuste. Las células tienen capacidades internas que no has descubierto. Ellas contienen dentro de si mismas la memoria de todas las formas “previas” de las que han sido parte.
Me gustaría hacer un aparte aquí: En ciertos términos, no puedes destruir la vida por un desastre nuclear. Por supuesto destruirías la vida, tal como la conoces y, en tus términos, la llevarías a un final, si las condiciones fueran las correctas (o incorrectas) formas de vida con las que estás familiarizado. En términos más amplios, sin embargo, vida mutante emergería – mutante solamente por tus estándares – pero vida bastante natural en si misma.
Para regresar a nuestro principal asunto del momento: El hecho es que el así llamado proceso de evolución depende mucho de las tendencias cooperativas inherentes en todas las propiedades de la vida y en todas las especies. No hay trasmigración de las almas, en que la personalidad total de una persona “regresa” como animal. Sin embargo, en la estructura física, hay un constante entremezclarse, de tal manera que las células de un hombre o de una mujer pueden convertirse en las células de una planta o de un animal, y viceversa por supuesto. Las células que han sido parte de un cerebro humano saben esto a su manera. Aquellas células que ahora componen tu propio cuerpo se han combinado y descombinado muchas veces para formar otras porciones del entorno natural.
Esta interior y sin embargo física transmigración de la conciencia siempre ha sido extremadamente importante, y representa un método natural de comunicación, unificando todas las especies y toda la vida física. Dentro de todos los organismos físicos, por lo tanto, hay un impulso hacia el desarrollo y el cambio, incluso como también hay un patrón de estabilidad dentro del cual tales alteraciones tienen lugar.
Históricamente, por supuesto, sigues un patrón de pensamiento de una sola línea, así que ves un cuadro en el que los peces dejan el océano y se convierten en reptiles; de estos, eventualmente aparecieron los mamíferos, y los primates y el hombre. Esa es, lo admito, una simple afirmación, pero es la manera como la mayoría de las personas piensan que ocurrió la evolución. Los términos de “progresión” son intrincados. Nunca te imaginas la situación siendo reversada, por ejemplo. Pocos de ustedes se imaginan un hombre reptil consciente. Les parece que la dirección que tomaron es la única dirección que se podía haber tomado.
Identificas una conciencia de ser altamente evolucionada con el desarrollo de tu propia especie, y con tu propio tipo de mecanismos perceptivos. Aplicas estos como normas o condiciones cuando examinas cualquier otro tipo de vida. En tu sistema de probabilidades no hay hombres o mujeres reptiles, y sin embargo, en otras probabilidades, ellos en realidad existen. Menciono esto solamente para mostrarte que el sistema evolutivo que reconoces no es más que uno de tales sistemas.
La base física permanece latente dentro de tu propia estructura celular, sin embargo. Piensas que la evolución está terminada. Su ímpetu, sin embargo, llega desde adentro de la conciencia misma. Siempre lo ha sido. En algunos cuartos está de moda en estos días decir que la conciencia del hombre es ahora un elemento en un nuevo tipo de evolución – pero esa “nueva conciencia” siempre ha estado inherente. Solamente ahora estás empezando a reconocer su existencia. Cada conciencia está consciente de ella como ella misma. Cada conciencia, entonces, es autoconsciente. Ella no puede ser autoconsciente de la misma manera como tú lo eres. Ella no puede reflejarse sobre su propia condición. Por otra parte, no tiene necesidad de hacerlo.
Los así llamados desarrollos futuros de tu especie no dependen de tus ideas y creencias. Esto aplica genéticamente en términos personales. Por ejemplo, si crees que puedes vivir hasta una vejez saludable y feliz, bien entrados los noventas, entonces incluso en la civilización Occidental lo harás. Tu intención emocional y tu creencia dirigirán el funcionamiento de tus células y producirá en ellas aquellas propiedades y habilidades inherentes que asegurará tal condición. Hay grupos de personas en lugares aislados que sostienen tales creencias, y en todos esos casos el cuerpo responde. Lo mismo aplica a la raza – a la especie, para ser más exacto. Hay una creatividad inextinguible dentro de las células mismas, que no estás utilizando como especie porque tus creencias se quedan tan atrás de tu espiritualidad y sabiduría biológica innatas. Tus ideas están empezando a cambiar. Sin embargo, a menos que cambies tu estructura, continuarás enfatizando la manipulación médica y tecnológica. En casos aislados, esto te mostrará algunos de los posibles resultados en el solo nivel físico. Sin embargo, tales técnicas no funcionarán en términos colectivos, o no te permitirán, digamos, prolongar una efectiva vida productiva, a menos que cambies tus creencias también en otras áreas, y aprendas la dinámica interior de la psique.
Ahora bien, es cierto entonces que las células operan, por una parte, aparte del tiempo, y por la otra, con una base firme en el tiempo, así que la integridad del cuerpo como un organismo del espacio-tiempo es el resultado.
Es verdad que en un nivel consciente todavía no operas por fuera del tiempo, pero estás limitado por él. Cuando tú mismo aprendas a liberarte hasta cierto punto de esas dimensiones, no estás simplemente duplicando o “regresando” a alguna condición más extensa, sino agregando un nuevo elemento a esa condición. El tipo de conciencia de ser que tienes es único, pero todos los tipos son únicos. Cada triunfo que tengas como individuo se refleja en tu especie y en su conocimiento celular.
En una forma, todos ustedes son sus propios mutantes, alterando creativamente las formaciones celulares. Cuando tu suerte parece depender de la herencia, por ejemplo, opera entonces la trasmisión de ideas y creencias; estas le dan señales a los cromosomas. Ellas causan auto- imágenes en miniatura, por así decirlo, que se reflejan en las células. En muchos casos, estas imágenes pueden ser alteradas, pero no con la tecnología que ustedes tienen.
Básicamente, la comprensión celular cabalga sobre el tiempo. Hay entonces una manera de introducir “nueva” información genética a una llamada célula dañada en el presente. Esto implica la manipulación de la conciencia, básicamente, y no aquella de artefactos, así como el principio de reversión del tiempo. Primero, la información indeseable debe ser borrada. Ella debe borrarse en el pasado, en tus términos. Algunos, aunque muy pocos, sanadores psíquicos hacen esto automáticamente, sin darse cuenta de lo que están haciendo. El cuerpo, por su cuenta, realiza este servicio con frecuencia, cuando automáticamente corrige ciertas condiciones, aunque ellas estaban impresas genéticamente. La impresión se vuelve regresiva. En tus términos, ellas se desvanecen en una serie de eventos probables que no te afectan físicamente.

domingo, 7 de noviembre de 2010

El Universo y La Psique 9

Tú formas tu propia realidad. Esa realidad contribuye a la experiencia de otros, pero cada uno posee una única, original postura en el espacio y el tiempo que es solo suya, en términos bastante prácticos, a pesar de la relativa existencia del tiempo.
Solamente cuando operas desde tu propia postura, puedes ayudar a otros con lo mejor de tu habilidad. Anticipar el peligro, o imaginativamente asumir los problemas de otros, te roba la misma energía con la que podrías ayudarles. No estoy diciendo, por consiguiente, que apartes tus ojos de las condiciones desafortunadas del mundo. Se necesita ayuda práctica en todas las áreas de la vida humana. Sin embargo, es mucho mejor, y en última instancia más práctico, concentrarse sobre los elementos benéficos de la civilización – mucho mejor organizar tus pensamientos en áreas de realización, que hacer listas mentales de las deficiencias y carencias del hombre.
Tal práctica lleva a sentimientos de impotencia y desesperación, en los que la acción efectiva parece imposible. La vida posee una exhuberancia. Si ella es querida, nutrida y estimulada, entonces se genera energía adicional que no es necesaria para los propósitos de la diaria vida privada – una superabundancia que puede ser dirigida efectivamente a aquellas áreas del mundo en donde la ayuda es más necesaria.
La fortaleza, la vitalidad, la efectividad del pensamiento es rara vez considerada. El pensamiento, puedes decir, no detendrá una guerra – sin embargo, ¿Qué crees inicio tal guerra? A lo largo de la historia los oprimidos han subido al poder, han utilizado la fuerza, se han rebelado contra sus opresores; y sin embargo, aprendiendo poco de esa experiencia, cambian y se convierten en la nueva élite, en los nuevos dueños del poder. Sus condiciones físicas pueden ser cambiadas completamente. Ahora son suyas, las oficinas del gobierno, la riqueza. Pasadas están las condiciones que, parecería, causaron el levantamiento. No obstante, en retaliación ellos golpean, formando una nueva clase de oprimidos, quienes deben a su turno levantarse y tomar represalias.
A pesar de todas las apariencias, las condiciones de naturaleza externa no causan las guerras, o la pobreza, o cualquiera de las desafortunadas circunstancias evidentes en tu mundo. Tus creencias forman la realidad. Tus pensamientos generan la experiencia práctica. Cuando estos cambian, las condiciones cambiarán. Agregar tu propia energía, enfoque y concentración a circunstancias terribles en otras partes del mundo no ayuda, sino que le agrega a tales situaciones.
Cerrar tus ojos ante ellas en una forma ignorante, lavarte las manos por ellas, por así decirlo, es igualmente miope. Pretender que tales situaciones no existen, por temor a ellas, solo traerá más cerca la realidad temida. Es mucho mejor situarte tú mismo firmemente en tu propia realidad, reconocerla como tuya, alentar tu fortaleza y creatividad, y desde ese punto de vista visualizar aquellas áreas del mundo o de tu propia sociedad que necesitan ayuda constructiva. A propósito, en tu propia vida, en tus diálogos diarios con otros, en tus relaciones a través de tus grupos y clubes, refuerza tanto como puedas la fortaleza y las habilidades de otros.
Ese reforzamiento le agregará al poder personal de todos los otros individuos con los que esas personas se ponen en contacto. Encuentra las creencias responsables por las condiciones desafortunadas. Si las ideas en este libro fueran comprendidas completamente, cada individuo estaría en capacidad de evaluar realísticamente su propia realidad. No habría necesidad de armar una nación por adelantado contra el ataque anticipado – pero imaginario – de otra nación.
Los rencores personales no se acumularían, así que hombres y mujeres temen tanto más heridas, que intentan esconderse de la vida o de las relaciones, o evitar el contacto con otros. No es virtuoso contar tus deficiencias. La justicia auto consciente puede ser un camino muy angosto. Si cada uno de ustedes comprendiera y percibiera la graciosa integridad de su propia individualidad, así como intentas percibir la belleza de todas las otras criaturas naturales, le permitirías a tu propia creatividad un mayor dominio. Hay orden en todos los elementos de la naturaleza, y tú eres parte de él.
La más grande extensión de las estaciones representa los alcances de tu alma. No conseguirás la espiritualidad volviendo tus ojos lejos de la naturaleza, o tratando tú mismo de deshacerte de ella. No “vislumbrarás la vida eterna intentando negar la vida que tienes ahora – ya que esa vida es tu único sendero, y proporciona sus propias pistas para que las sigas.
Todo Lo Que Existe vibra con el deseo. La negación del deseo solo te traerá
languidez. Aquellos que niegan el deseo son los más heridos por él. Cada una de tus vidas son episodios en miniatura, y sin embargo gigantes, mortales e inmortales a la vez, proporcionando experiencias que formas significativamente, abriendo dimensiones de realidad disponibles para nadie más, ya que nadie puede visualizar la existencia desde tu punto de vista. Nadie puede, excepto tú. Hay comunicaciones a otros niveles, pero tu experiencia de la existencia es completamente original, para ser atesorada.
Nadie desde un umbral psicológico, no obstante extenso, puede escribir un libro que defina la psique, sino solo presentar indicaciones y pistas, palabras y símbolos. Las palabras y las ideas en este libro todas están para otras realidades internas – es decir, son como teclas de piano golpeando otras cuerdas que, esperanzadamente, serán activadas dentro de la psique de cada lector.
Cada uno se expresa ahora en el mundo natural, y ese mundo se expresa en una realidad de la cual surge la naturaleza. Las raíces de la psique están seguras, alimentándola como el árbol del suelo del ser. La fuente de la fortaleza de la psique está dentro de cada individuo, dentro del tejido invisible de la existencia de la persona.
La naturaleza es lujosa y abundante en sus expresiones. La realidad más grande de la cual surge la naturaleza es aun más abundante, y dentro de esa experiencia multidimensional ningún individuo es ignorado, olvidado, despedido, perdido, o abandonado. Un árbol no tiene que pedir alimentación al suelo o al sol, y así mismo todo lo que necesitas está disponible para ti en la experiencia práctica. Si crees que no mereces el alimento, si crees que la vida misma es peligrosa, entonces tus propias creencias hacen imposible para ti la plena utilización de la ayuda disponible. En gran medida, puesto que estás todavía vivo, eres alimentado por supuesto. No puedes cerrar la vitalidad de tu propio ser tan fácilmente, y la vitalidad “desperdiciada” en ataques profundos de depresión es con frecuencia mayor que la energía utilizada en actividades creativas. Eres una parte de Todo Lo Que Existe; por consiguiente, el universo se inclina en tu dirección. El da. El resuena con vitalidad. Entonces abandona las creencias que te dicen de otra manera. Busca dentro de ti mismo – cada uno de ustedes – aquellos sentimientos de exhuberancia que tienes, incluso si son ocasionales, y alienta aquellos eventos o pensamientos que los producen.
No puedes encontrar tu psique pensando de ella como una cosa separada, como una fina joya en un closet eterno. Solo puedes experimentar su fortaleza y vitalidad explorando la realidad subjetiva tuya, ya que ella te llevará infaliblemente a la fuente mayor del ser que trasciende el espacio y el tiempo.

jueves, 4 de noviembre de 2010

El Universo y La Psique 8

Hay aquellos que hacen carreras condenando las faltas y fallas de otros, o las de la especie misma, y por esa actitud la gran energía del hombre y su buena intención permanecen invisibles. El hombre está en el proceso de llegar a ser. Sus obras son defectuosas – pero ellas son las obras defectuosas de un aprendiz de artista genial en formación, cuyos fracasos son en realidad trascendentales y grotescos solamente a la luz de su sentido genio, el que siempre lo lleva y lo dirige hacia adelante.
Cuando estás considerando el futuro, en tus términos, los logros constructivos son tan realistas como los destructivos. En esos términos, cada año de la existencia del hombre de hecho justifica una más optimista en lugar de una pesimista visión. No puedes poner la buena intención del hombre por fuera del contexto físico, ya que por fuera de ese contexto no tienes la criatura que conoces. No puedes decir que la naturaleza es buena, pero que dio lugar al hombre, que es un cáncer sobre ella, ya que la naturaleza tiene un mejor sentido. No puedes decir, tampoco, que la Naturaleza – con una N en mayúsculas – destruirá al hombre si él la ofende, o que la Naturaleza – con una N en mayúsculas - tiene poco uso para sus propias especies, sino que solo quiere promover la Vida – con una V en mayúsculas - ya que la Naturaleza está dentro de cada miembro de cada especie; y sin cada miembro de cada especie, la Naturaleza – con una N en mayúsculas o en minúsculas – no existiría.
Por lo que eres una criatura natural, dentro de ti hay un natural estado de ser. Ese estado puede ser un siempre presente depósito de paz, vitalidad y comprensión.
Cualquiera que sea lo que tus científicos piensen, tu cuerpo y tu conciencia y tu universo brotan constantemente hacia la realización. Por consiguiente, cultivando la limpia experiencia de tu propia conciencia y ser con el tiempo y con el momento tal como lo sientes, puedes aprovechar la vitalidad y poder más grandes que están disponibles.
Para hacer esto, confía en tu información sensorial inmediata, no en la experiencia secundaria como se describió. Esa información sensorial primaria, mientras está señalada en el presente, proporcionándote la necesaria postura en el tiempo, todavía puede abrirse para ti la atemporalidad desde la cual surge todo el tiempo, puede traerte intimaciones intuitivas, insinuando la verdadera naturaleza de el llegar a ser siempre presente del universo.
Ese tipo de experiencia te permitirá vislumbrar los más grandes patrones de la creatividad del hombre, y tu parte en ella. Se te ha enseñado a concentrarte en criticismos y fallas en tu sociedad; y en tus tiempos parece que todo funcionara mal – que si se le deja solo, el mundo se hundirá, el universo morirá, el hombre se destruirá a si mismo; y estas creencias infiltran tanto tu comportamiento que ellas organizan mucho de tu experiencia y te roban los beneficios que la naturaleza misma proporciona en la experiencia primaria directa.
Con frecuencia entonces ignoras la realidad de tus sentidos en el mundo – la lujosa vitalidad y confort del momento diario – exagerando la importancia de la experiencia secundaria según se definió en esta discusión.
La proyección o profecía más negativa parece ser la más práctica; cuando estás leyendo acerca de las enfermedades del mundo, dices con toda honestidad, y sin ningún humor: “¿Como puedo ignorar la realidad, la realidad destructiva del presente?” En los términos más prácticos, inmediatos y mundanos, sin embargo, tú y tu mundo están en ese momento naturalmente y físicamente seguros, como tus sensaciones corporales perciben inmediatamente. En los más básicos términos corporales, no estás reaccionando a condiciones presentes.
Esto sería solo demasiado claro si estuvieras experimentando físicamente las condiciones acerca de las cuales podrías estar leyendo. Si el mundo se estuviera desplomando alrededor de tus hombros, solo comprenderías demasiado claramente que “antes” estabas reaccionando a una situación imaginada y no a una situación real.
Temo pensar que algo de esto se te escapará, a ti y a otros. Pero mientras los desastres, imaginados o encontrados en segundo lugar, pueden de hecho ocurrir más tarde, ellos son muy diferentes de los encontrados físicamente. Tú solamente agregas a su naturaleza desafortunada cavilando negativamente sobre lo que podría suceder en el futuro, y destruyes tu propia postura. Tu postura en el tiempo es sumamente importante, ya que ella es tu base de operaciones práctica.
Debes confiar en tu información sensorial en ese respecto. De otra manera, confundes tu postura psicológica y corporal, ya que el cuerpo no puede estar en una situación de seguridad y peligro al mismo tiempo. Desperdicia sus recursos peleando batallas imaginarias.
Para muchas personas las guerras, la pobreza, el asesinato, la traición, la corrupción, son experiencia primaria, y deben entenderse con ella – ya que requiere atención inmediata. El cuerpo debe reaccionar. Tales personas son golpeadas, o robadas. Esa es información sensorial inmediata, y en una u otro forma ellas reaccionan. Sin embargo, débilmente, su punto de poder corresponde inmediatamente con el punto de peligro.
No puedes reaccionar físicamente de la misma manera a peligros proyectados o imaginados. Parece no haber una reacción posible. Estás frustrado. Estás destinado a entenderte con tu inmediata experiencia primaria, y al hacerlo te haces cargo de tu responsabilidad. Estás en capacidad de tomar acción en tu propia experiencia, y por consiguiente afectar a otros. No tienes que ser ignorante de las guerras en otras esquinas del mundo, o cerrar tus ojos. Pero si permites que esas experiencias oscurezcan tu presente y válida intersección con la realidad, entonces te expresas y actúas desde una posición no propia, y le niegas al mundo cualesquiera que sean los beneficios que tu propia versión actual de la realidad podría permitirte dar.
La validez natural de tus sentidos como criatura debe permanecer clara, y solo entonces puedes aprovechar totalmente aquellas intuiciones y visiones que deben llegar a través de tu propia intersección privada con el espacio y el tiempo.
En esos términos, la siempre presente integridad de la naturaleza te rodea por todas partes. Ella representa tu experiencia directa. Ella ofrece el confort, la creatividad, y la inspiración que solo impides si permites que la experiencia secundaria sustituya tu encuentro momento-a-momento diario con la tierra física.

lunes, 1 de noviembre de 2010

El Universo y La Psique 7

Haz una distinción en tu mente entre el hombre y las obras del hombre. Argumenta todo lo que quieras contra sus obras, a medida que lees en tus periódicos de errores, estupideces, traiciones o guerra. Colecciona páginas y resmas de tal material, si se acomoda a tu fantasía – y estoy hablando no solamente para ti, sino para alguien que espera encontrar un indicio de la verdad, la paz de la mente o la creatividad.
Colecciona libros de los fracasos del hombre. Personalmente no sé porque alguien coleccionaría las peores obras de alguna artista, y obtendría placer despedazándolas. El hombre ha producido algunas obras buenas: El alto nivel de comunicación verbal, las multitudinarias variedades de interacciones emocionales y el intercambio cultural, la facilidad para la exteriorización de ideas y conceptos, los alcances de la imaginación – todas estas, y muchas otras, son únicas en el universo.
Identificar al hombre con sus obras más pobres es buscar a propósito los estropicios, los errores, de un buen artista, y enseguida condenarlo. Hacer esto es condenarse ustedes mismos personalmente. Si un científico dice que la conciencia es el resultado del azar, o si las teorías de Darwin dicen que el hombre básicamente es el hijo triunfante de asesinos, muchas personas objetarían. Si dices, sin embargo, que los hombres son idiotas, o que ellos no merecen el piso sobre el que caminan, estás diciendo la misma cosa. Porque debes preocuparte por esta realidad, tal como la conoces; en esos términos, condenar al hombre es condenar la especie, tal como la conoces, en los términos prácticos de tu mundo.
Decir que las personas pueden escapar hacia otra realidad es pragmáticamente una salida fácil – esto es aparte de la realidad de las probabilidades, ya que estoy hablando desde tu punto de vista emocional.
Ahora bien, físicamente tu cuerpo tiene una postura en el espacio y el tiempo. Hablaré de experiencia primaria y secundaria. Llamemos experiencia primaria aquella que existe inmediatamente, en términos sensoriales en tu momento de tiempo – el contacto del cuerpo con el entorno. Estoy creando ciertas divisiones aquí para hacer nuestra discusión – o monólogo – más fácil. Por lo tanto, llamaré experiencia secundaria aquella información que te llega a través de, digamos, la lectura, la televisión, la discusión con otros, las cartas, y así sucesivamente.
El tipo de experiencia secundaria es en gran medida simbólico. Esto debe estar claro. Leer acerca de la guerra en medio de una tranquila tarde soleada, no es la misma cosa que estar en una guerra, no importa que tan vivida sea la descripción. Leer acerca de la escasez de energía no es lo mismo que estar sentado en una casa helada. Leer acerca de la posible aniquilación de la humanidad por medio de la destrucción nuclear u otras estupideces, cuando estás lo suficientemente tranquilo en tu sala de estar, obviamente está demasiado divorciado de la realidad descrita en un articulo.
A los niveles que nos preocupan, el cuerpo debe primordialmente reaccionar a la presente, inmediata, primaria existencia en el espacio y el tiempo. A otros niveles, él esta equipado para manejar muchos tipos de información, en la que he mencionado antes la precognición de las células. Sin embargo, el cuerpo depende de la mente consciente para que le de una evaluación clara de las condiciones precisas de espacio y tiempo que ocupa. Depende de ese conocimiento.
Si estás instalado en un cuarto confortable, sin ningún peligro presente, tus sentidos deberían transmitir esa información precisamente. Tu mente consciente debe asimilarla. Debería ser un logro lo suficientemente fácil mirar a tu alrededor y ver que no estás en peligro.
Tu mente consciente está destinada para darle a tu cuerpo una evaluación de lo que llamaré condiciones culturales, ya que hay sofisticaciones y especificaciones que, en tus términos, solo la conciencia puede evaluar. Si, bajo condiciones naturalmente seguras, en los términos de la experiencia primaria, llegas a estar abrumado por señales inseguras de experiencia secundaria – es decir, de tu lectura o lo que sea – muestras una falta de discriminación. No estás en capacidad de diferenciar entre la situación actual físicamente segura, y la imaginada, la que es quizá insegura, suscitando alarmas de peligro.
Los mecanismos del cuerpo llegan a estar sumamente desorientados. Las señales al cuerpo son contradictorias, así que después de un tiempo, si tales condiciones continúan, ya no podrás decir si estás en un peligro real o en un peligro imaginado. Tu mente obliga entonces a tu cuerpo a estar en un estado de alerta constante – pero lo más desafortunado, tú mismo te adiestras para ignorar tu feedback sensorial directo en el momento presente.
Tu cuerpo podría decir entonces que estás seguro, y tus sentidos indicarte que ninguna peligro está presente – y sin embargo has empezado a confiar tanto en la experiencia secundaria, que no confías en tus reacciones como criatura.
Por el gran don de imaginación del hombre, sin embargo, las señales de alarma no solo invaden un presente momento seguro, sino que van tintineando en el momento siguiente y en el que le sigue, y están proyectándose infinitamente hacia el futuro. Hasta cualquier grado, y en cualquier forma, cada individuo es por consiguiente despojado de su creencia en la habilidad personal para actuar significativamente o con propósito en el presente.
El cuerpo no puede actuar mañana, hoy. Su información sensorial debe ser clara. Este sentimiento resultante de impotencia para actuar conduce a un estado de desesperanza de varios grados – y ese estado de ánimo mismo no se adhiere a detalles específicos, sino que impregna la vida emocional si se le permite. Hasta cualquier grado, material crítico, condenatorio, muy frecuentemente se vuelve auto profetizante – ya que aquellos que ponen mérito en él les permiten nublar sus reacciones.
En tus términos, mientras vives, y en los más pertinentes términos de sensación íntima, tu realidad debe ser la que percibes en la estructura de tu tiempo, y lo que creas dentro de esa estructura a medida que es experimentada. Por lo tanto, te ruego no comportarte como si el hombre se destruirá a si mismo en algún futuro – no comportarte como si el hombre fuera un imbécil, condenado a la extinción, un loco, un animal medio loco con un cerebro enloquecido.
Ninguna profecía de destrucción que el hombre tanto teme es una realidad en tu tiempo; ni por todos los profetas críticos a través de las eras, y los precursores de la perdición, la creatividad del hombre lo ha destruido a él mismo en esos términos.