Datos personales

jueves, 28 de agosto de 2008

Construcciones Psicológicas

Existe un proceso de construcciones psicológicas en donde estructuras psicológicas básicas son manipuladas y formadas dentro de una perspectiva en la cual no percibimos físicamente.
Esta construcción psicológica tiene lugar en lo que llamamos subconsciente. Anteriormente hemos explicado que no existe ninguna división real entre la conciencia y la subconciencia, siendo ambas igualmente conscientes y siendo ambas parte de la misma conciencia del ser total.
El subconsciente simplemente está enterado, operando internamente, de una perspectiva psicológica muy válida dentro de la cual funciona y con la que el llamado ser consciente no está familiarizado. Antes de que la construcción física pueda ocurrir, debe llevarse a cabo la percepción psicológica, la manipulación y construcción de la información interior, o de la estructura interior.
Estas estructuras y construcciones psicológicas son la base para la construcción material y por consiguiente la manipulación interior de las estructuras psicológicas es sumamente importante.
Tomaremos como ejemplo el odio. El odio no existe como una estructura psicológica básica. Sin embargo, es el resultado de la manipulación psicológica del miedo, y el miedo no es una estructura psicológica básica.
La supervivencia es una estructura psicológica básica. La construcción de la estructura psicológica básica de supervivencia de la conciencia debe ser interpretada, o proyectada, o construida, en términos de la supervivencia física dentro de nuestro campo físico.
La percepción, manipulación, o construcción inadecuada en la estructura psicológica de supervivencia de la conciencia conduce a la creación psicológica del miedo y el odio.
El individuo construye entonces el miedo y el odio en una construcción física, dándole al miedo y al odio una forma física definida. El error está en la inhabilidad original para percibir la correcta información interior, la estructura psicológica de supervivencia de la conciencia básica que está subyacente.
El error puede convertirse en algo habitual, coloreando todas las otras estructuras psicológicas, dando como resultado una desafortunada y peligrosa construcción física. Estos son errores extremadamente destructivos y tienen muchas causas. La construcción física es percibida entonces por los sentidos externos como amenazante y miedosa, e influencia por medio de los sentidos externos al individuo interior de tal manera que él empieza un circulo vicioso en un intento de formar en adelante más construcciones físicas amenazantes para combatir las anteriores. Entre más grande sea el número de tales estructuras físicas destructivas, mayor será su expectativa de miedo ulterior.
Hemos insinuado las razones para tales errores. Los errores habituales se convierten en parte de la perspectiva psicológica. La comunicación entre los individuos en la perspectiva psicológica es casi exclusivamente telepática y es recogida desde antes por los jóvenes, de sus propios padres. Al principio, los niños empiezan su construcción física de acuerdo con las líneas telepáticas recibidas de sus padres, al mismo tiempo que aprenden sus propias manipulaciones en la perspectiva psicológica.
Utilizando la analogía de la supervivencia de la conciencia y sus distorsiones para llegar al miedo y al odio, estamos dando un ejemplo de las maneras en que las estructuras psicológicas básicas son malinterpretadas con resultados desafortunados.
No existe una ley que limite el número de estructuras psicológicas disponibles para nosotros, pero por nuestro actual estado de desarrollo, y por esto solamente, tenemos obstáculos. La experiencia, o la falta de ella en varios campos no ha sido aun posible, así que, en términos prácticos, tenemos un número limitado de estructuras psicológicas básicas con las cuales entendernos; y nuestra percepción, nuestro claro entendimiento psicológico, nuestra comprensión intuitiva y la manipulación y construcción psicológica de estas estructuras básicas, determinarán la validez de nuestras construcciones materiales, que formarán entonces nuestro entorno.
La forma del entorno físico no es estática. Aunque está hecho de materia, no es una cosa, en un lugar, dentro de un tiempo, ni ninguna otra cosa; Es decir, la calidad que llamamos entorno y de la que hablamos como si fuera una cosa, siempre con una figura y una forma, en realidad son muchas cosas, en muchos lugares y en varios tiempos, con nosotros en el punto focal.
Por lo tanto nosotros en cualquier tiempo, físicamente, podemos cambiar lo que llamamos entorno, simplemente cambiando nuestra localización. Por consiguiente, el entorno involucra no una cosa sino una perspectiva que existe en relación con el individuo, puesto que el entorno físico por sí mismo no es una cosa que podamos llevar con nosotros, sino una relación dentro de una perspectiva personal, ¿En donde se origina entonces la sensación de consistencia del entorno?
Un hombre, por ejemplo, en varias etapas de su vida puede estar rodeado siempre de libros, o de elementos de pesca, o por una ciudad, o por el campo. Ellos no serán siempre los mismos libros, o los mismos elementos de pesca, o la misma ciudad, o el mismo campo. Sin embargo, el entorno de un individuo será visto teniendo consistencia de elementos y un patrón de apariencias que pueden llamarse su característica.
La sensación de continuidad en un entorno individual es el resultado de la manera característica del individuo de construir estructuras psicológicas básicas dentro de estructuras físicas.
Las estructuras psicológicas básicas disponibles tienen solidez definida, profundidad, masa, etc., en la perspectiva psicológica, y pueden formarse dentro de innumerables estructuras de patrones que entonces son construidas físicamente. Las variaciones de construcción son infinitas. No hay nada que pueda obligar al individuo a formar estructuras psicológicas de odio y miedo, partiendo de la estructura básica de supervivencia de la conciencia. Hacerlo así, representa una inhabilidad para percibir claramente la naturaleza de la estructura básica y esa inhabilidad a menudo conduce al hábito, de tal manera que otras estructuras básicas son también malinterpretadas.




No hay comentarios: