Las Relaciones Reencarnacionales
Como especie, en el contexto del uso normal, te has considerado a ti mismo como separado del resto de la naturaleza y de la conciencia. Tu propia supervivencia como especie era tu principal preocupación. Considerabas las otras especies solamente a la luz de su utilidad para ti. No tenías una verdadera concepción de lo sagrada que es toda conciencia, ni de tu relación con ella. Estabas perdiendo tu comprensión de esa gran verdad.
En las circunstancias actuales, estás siguiendo adelante con la idea de la supervivencia de la especie, a pesar de las consecuencias, y la idea de cambiar el entorno para que se acomode a tus propósitos. Esto te ha llevado a no tener en cuenta las verdades espirituales.
Por esto, en la realidad física estás viendo los resultados. Las personalidades que están regresando ahora, lo están haciendo por varias razones. Algunas de ellas son atraídas a la vida física de nuevo por estas actitudes. Ellas son las que en el pasado, en tus términos, se esforzaron por alcanzar la existencia física sin consideración por los derechos de las otras especies. Son impulsados a regresar por sus propios deseos.
La especie debe aprender el valor del hombre individual. La especie también está conociendo su dependencia de otras especies y empezando a comprender su parte en toda la estructura de la realidad física.
Algunos individuos están renaciendo en este tiempo simplemente para ayudarte a comprender. Ellos están forzando las cosas y forzando la crisis, porque todavía tienes tiempo de cambiar tus maneras. Estás trabajando en dos problemas principales y los dos involucran lo sagrado que es el individuo y la relación del individuo con otros y con todas las conciencias orientadas físicamente.
El problema de la guerra tarde o temprano te enseñará que cuando matas a otro hombre, básicamente, terminarás matándote a ti mismo. El problema de la superpoblación te enseñará que si no tienes una preocupación amorosa por el entorno en el cual habitas, el no te sostendrá por más tiempo y no serás digno de él. No estarás destruyendo el planeta. No estarás destruyendo los pájaros o las flores, o los cereales o los animales. No serás digno de ellos y ellos te destruirán.
Tú mismo has iniciado el problema dentro de la estructura de tu referencia. No comprenderás tu parte dentro de la estructura de la naturaleza, hasta que realmente no te veas en peligro de despedazarla. No destruirás la conciencia. No aniquilaras la conciencia ni siquiera de una hoja, pero en tu contexto, si el problema no fuese resuelto, estos desaparecerían de tu experiencia.
La crisis es un tipo de terapia, sin embargo. Es un método de enseñanza que has establecido para ti mismo, porque lo necesitas. Y lo necesitas ahora, antes de que la especie se embarque en viajes a otras realidades físicas. Debes aprender tus lecciones ahora, en tu propio patio, antes de que viajes a otros mundos. De esta manera, has traído esto sobre ti mismo con ese propósito y aprenderás.
Como especie, en el contexto del uso normal, te has considerado a ti mismo como separado del resto de la naturaleza y de la conciencia. Tu propia supervivencia como especie era tu principal preocupación. Considerabas las otras especies solamente a la luz de su utilidad para ti. No tenías una verdadera concepción de lo sagrada que es toda conciencia, ni de tu relación con ella. Estabas perdiendo tu comprensión de esa gran verdad.
En las circunstancias actuales, estás siguiendo adelante con la idea de la supervivencia de la especie, a pesar de las consecuencias, y la idea de cambiar el entorno para que se acomode a tus propósitos. Esto te ha llevado a no tener en cuenta las verdades espirituales.
Por esto, en la realidad física estás viendo los resultados. Las personalidades que están regresando ahora, lo están haciendo por varias razones. Algunas de ellas son atraídas a la vida física de nuevo por estas actitudes. Ellas son las que en el pasado, en tus términos, se esforzaron por alcanzar la existencia física sin consideración por los derechos de las otras especies. Son impulsados a regresar por sus propios deseos.
La especie debe aprender el valor del hombre individual. La especie también está conociendo su dependencia de otras especies y empezando a comprender su parte en toda la estructura de la realidad física.
Algunos individuos están renaciendo en este tiempo simplemente para ayudarte a comprender. Ellos están forzando las cosas y forzando la crisis, porque todavía tienes tiempo de cambiar tus maneras. Estás trabajando en dos problemas principales y los dos involucran lo sagrado que es el individuo y la relación del individuo con otros y con todas las conciencias orientadas físicamente.
El problema de la guerra tarde o temprano te enseñará que cuando matas a otro hombre, básicamente, terminarás matándote a ti mismo. El problema de la superpoblación te enseñará que si no tienes una preocupación amorosa por el entorno en el cual habitas, el no te sostendrá por más tiempo y no serás digno de él. No estarás destruyendo el planeta. No estarás destruyendo los pájaros o las flores, o los cereales o los animales. No serás digno de ellos y ellos te destruirán.
Tú mismo has iniciado el problema dentro de la estructura de tu referencia. No comprenderás tu parte dentro de la estructura de la naturaleza, hasta que realmente no te veas en peligro de despedazarla. No destruirás la conciencia. No aniquilaras la conciencia ni siquiera de una hoja, pero en tu contexto, si el problema no fuese resuelto, estos desaparecerían de tu experiencia.
La crisis es un tipo de terapia, sin embargo. Es un método de enseñanza que has establecido para ti mismo, porque lo necesitas. Y lo necesitas ahora, antes de que la especie se embarque en viajes a otras realidades físicas. Debes aprender tus lecciones ahora, en tu propio patio, antes de que viajes a otros mundos. De esta manera, has traído esto sobre ti mismo con ese propósito y aprenderás.
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