Datos personales

lunes, 12 de julio de 2010

La Psique, Lenguajes, y dioses 3

Tú eres una parte del mundo, y sin embargo eres tú mismo. Esto no te confunde, y sigues tu propia sensación de identidad sin dificultad, aunque estás rodeado por todas partes por otros individuos.
Usando esto como una analogía, tú eres una parte de tu psique o de tu alma, habitando dentro de ella, siguiendo fácilmente tu propio sentido de identidad sin dificultad, aunque esa psique también contiene otras identidades, además de la que concibes como la tuya. Sacas el sustento del mundo, y creces a través de su medio. Contribuyes con tus habilidades y experiencia, ayudando a formar la civilización y la cultura del mundo. Hasta cierto fuerte punto, tienes el mismo tipo de relación con tu propia psique.
A través de métodos ordinarios de comunicación, estás en capacidad de decir lo que está pasando en otros países además del tuyo, aun sin viajar a ellos. Las transmisiones de noticias te familiarizan con las condiciones alrededor del mundo.
Ahora bien, también hay “transmisiones” internas pasando constantemente – con las que, sin embargo, no estás sintonizado conscientemente. Éstas te mantienen en contacto con otras partes de tu propia psique. Eres tan parte del mundo que tu más ligera acción contribuye a su realidad. Tu respiración cambia la atmosfera. Tus encuentros con otros alteran los tejidos de sus vidas, y las vidas de aquellos que se ponen en contacto con ellos.
Es fácil para ti ver como las células de tu cuerpo lo forman – es decir, al menos comprendes la naturaleza cooperativa de las actividades de las células. Una alteración de parte de una célula, causa inmediatamente cambios en las otras, y produce una diferencia en el comportamiento del cuerpo. Es algo más difícil para ti comprender las formas en las que tus propias acciones y aquellas de otros se combinan para producir los eventos del mundo. Por una parte, cada uno de mis lectores no es más que un individuo vivo sobre el planeta en un “tiempo” dado. Puede parecer que el individuo tenga poco poder. Por otra parte, cada individuo vivo es uno necesario. Es cierto decir que el mundo empieza y termina con cada persona. Esto es, cada una de tus acciones es importante, contribuyendo a la experiencia de otros a quienes no conoces, y cada individuo es como un centro alrededor del cual el mundo gira.
Si no hubieras hecho lo que hiciste hoy, por ejemplo, la totalidad del mundo sería en algún modo diferente.
Tus actos salen en ondas al exterior en formas que no comprendes, interactuando con la experiencia de otros, y por lo tanto formando los eventos del mundo. La persona más famosa y la persona más anónima están conectadas por medio de tal estructura, y una acción aparentemente pequeña e inocua puede terminar cambiando la historia, tal como la comprendes.
Los niños con frecuencia sienten que el mundo y el tiempo empezaron con su nacimiento. Toman el pasado del mundo con base en la fe. En términos muy importantes, este es un sentimiento bastante legítimo, ya que nadie más puede experimentar el mundo desde algún otro punto de vista, excepto el propio, o afectarlo, excepto por medio de una acción privada. En masa, tal acción individual causa los eventos del mundo.
En términos metafísicos, tienes tu ser, tu psique, o alma, un tanto de la misma manera. Las identidades son obviamente entornos psíquicos, primordialmente, más que entornos físicos. Los objetos físicos no se pueden mover a través de otros, así como una mesa no puede moverse a través de una silla. Los eventos mentales se comportan diferentemente. Ellos se pueden mezclar y fundir, moverse a través de otros, mientras todavía mantienen su propio enfoque. Pueden interactuar en niveles psíquicos, en la forma que los eventos lo hacen a niveles físicos, pero sin las restricciones físicas. Aunque eres una parte de tu psique, tu identidad todavía es inviolable. Ella no será sumergida o aniquilada dentro de un ser mayor. Ella lleva un sello – una marca divina – de su propia integridad. Sigue su propio enfoque, y se conoce a si misma como ella misma, aun mientras su propia existencia como ella misma puede no ser más que una parte de otra “identidad”.
Más aun, no hay nada que le impida explorar esta otra identidad mayor, o moverse dentro de ella, por así decirlo. Cuando esto sucede, las dos identidades cambian. En términos más amplios, la psique, o el alma, en ninguna parte existen como un producto o una identidad terminados. Por otra parte, ella siempre está llegando a ser, y ese llegar a ser sucede por parte de cada una de sus propias porciones.
Tu misma postura y existencia física está dependiendo de porciones de tu realidad de la psique, o de la existencia de tu alma, de la cual normalmente no estás enterado. Esas porciones también están dependiendo de tu existencia, sin embargo.



No hay comentarios: