Hay más mundos de lo que supones, y en su propia experiencia privada cada uno de ustedes contribuye al mundo que conoce. Tú y tus contrapartes juntos lo forman. Tu solo cuerpo físico está equipado para percibir mucho más de lo que actualmente le permites. Físicamente, eres una parte de cada otra persona sobre la tierra, y tienes una conexión con cada hoja, con cada rana y con cada clavo.
Escoges la ciudad o el estado o el país en donde vives. Nadie te obliga a permanecer ahí, a menos que estés buscando una escusa para permanecer. Así mismo escoges también tu tierra psíquica. Puedes viajar desde una tierra psíquica a otra, así como puedes viajar hacia otras partes del mundo físico. Algunos grandes viajeros nunca dejan el país de su nacimiento.
Miguel Ángel recorrió los siglos, recogiendo visiones e ideas, así como otros podrían comprar tarjetas postales, viajando desde un país a una tierra extraña. Su genio te muestra lo que eres, y sin embargo es apenas un indicio del potencial con el que tu especie está dotada.
A la luz de tales ideales, seguramente pareces deseoso – y sin embargo tu realidad es una en la que las más grandes libertades han sido permitidas. Esto quiere decir que ustedes mismos se han dado la gama completa, de tal manera que todas las probabilidades podrían ser exploradas, y ninguna excluida, que fuera físicamente factible.
Esta especie no se dio a si misma ningún tabú “preordenado.”
Los infinitos rangos posibles para las capacidades humanas serian explorados – y aquellos que escogieron esa ruta dijeron: “Confiamos en que nuestra creatividad encontrará su propio camino, y si hay pesadillas despertaremos de ellas. Incluso aprenderemos de ellas. Nos atreveremos a hacer a un lado las dimensiones del ser dentro de aquellos reinos en los que solo los dioses han ido antes – y a través de nuestra total vulnerabilidad, descubriremos la divinidad que le da significado a nuestra humanidad. Y a través de la compasión que hemos aprendido, estaremos en capacidad de comprender los errores divinos que nos ofrece el regalo de nuestro nacimiento. Las almas y las moléculas cada una están aprendiendo, cada una está formando realidades, cada una es parte de una divinidad en la que cada contraparte tiene su parte que jugar.”
Yo resido, en cierto modo, en un reino que es más directo que el tuyo. Me permito a mi mismo un mayor reconocimiento de mí ser. Hablo con la sabiduría, por ejemplo, que tus células expresarían si ellas tuvieran habla.
Estoy más consciente de mi realidad de lo que tú estás de la tuya, pero los términos del ser son los mismos en cada lugar y en cada tiempo. Ellos traen la más grande comprensión de cada ser, de si mismo. Ruburt experimenta ahora lo que llama una cualidad masiva, una expansión de la conciencia física y psíquica en la que el amado mundo familiar parece pequeño – y sin embargo, es dos veces precioso. Así aparece para mi conciencia.
Las guerras mezquinas, incluso aquellas que aun están por pelearse, no son más que confusos recuerdos, una vez vitales pero perdidos como pesadillas en los despertares mayores. Así que, aun en este momento, Ruburt siente débilmente un recuerdo nostálgico de las vidas que han llegado y se han ido, como tú podrías sentirlo por los sueños afectuosos difícilmente recordados.
Ellos representan un presente único más allá de contar, vivo en cada conciencia, más importante de lo que reconoces. No hay ningunas normas reales que se puedan seguir que te llevaran hacia tal encuentro con el momento de realidad presente – solamente un impulso en la naturaleza de tu ser. Y ese impulso está dentro de ti, bien sea que lo reconozcas o no, ya que el te da tu experiencia presente; y sin importar como tu mente se cuestiona, cabalga seguramente en la gran creatividad del alma.
El alma constantemente crea el cuerpo, y cada individuo sobre la faz de la tierra, en cualquier tiempo dado, pone su impulso en esa realidad. Ese sentimiento de certeza es el mismo que toda planta conoce. Cada idea, cada visión creativa, cada sueño, cabalga sobre el mismo impulso seguro.
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